No hay duda de que la tecnología forma parte de nuestro día a día y la población está cada vez más informada de las innovaciones. Prueba de ello es que la tecnología es uno de los temas más comentados en los medios. Los últimos años la palabra de moda ha sido “metaverso”. No hace tanto (a finales de 2021) supimos el gigante tecnológico Facebook cambiaba su nombre a Meta, el mensaje estaba claro.
Sin embargo, parece que otro término ha llegado para destronar al Metaverso este año y se trata de la Inteligencia Artificial (IA). A estas alturas casi todos habremos oído o leído sobre ChatGPT o DALL-E o, por lo menos, seguro que algo nos ha llegado sobre texto o imágenes generadas por Inteligencia Artificial.
Los culpables de todo esto son los sospechosos habituales: Google, Elon Musk, Microsoft u OpenAI. Algunos ejemplos de los movimientos en este campo:
- Microsoft ha anunciado una inversión multimillonaria en OpenAI y ya busca implementar ChatGPT en sus productos como Teams o Bing.
- Google ha anunciado que va a abrir al público su IA conversacional: Bard.
¿A qué viene todo este jaleo? Esta es la pregunta que mucha gente se esta haciendo. La respuesta simple es que estamos viendo un tema revolucionario. Estas IA vienen para cambiar nuestra forma de trabajar en todos los sectores. ¡Las máquinas han llegado y se nos quieren quitar nuestros puestos de trabajo! Calma, no nos estamos enfrentando a Skynet y no hay que salvar a John Connor. Lo cierto es que estamos viendo el nacimiento de una nueva herramienta increíblemente potente y versátil.
Utilizar la IA como herramienta para mejorar algunas tareas no es nada nuevo. En realidad, para data analytics y Big Data ya es un aliado muy conocido para algunas marcas. Los ordenadores son mucho mejores que nosotros a la hora de leer un alto contenido de datos y encontrar patrones que pueden servirnos para mejorar esa área. Hasta ahora es como los hemos visto, capaces de hacer cosas mecánicas que tienen unas instrucciones claras o hacer operaciones matemáticas. Pero ahora resulta que son capaces de esto y mucho más: han entrado en el terreno de la creatividad.
Todos los sectores tenemos que adoptar la IA para mejorar nuestras tareas. Un ejemplo bastante claro de esta revolución son los programadores. Hasta ahora entraban en StackOverflow a hablar con otros desarrolladores para resolver sus dudas. A partir de ahora van a empezar a poder hacer lo mismo con una IA que directamente les escriba el código que quieren. Igualmente, cualquier persona va a tener acceso a un código básico, bastaría con explicarle a una IA qué necesitas y pedirle que escriba un programa que haga eso.
En otros sectores tenemos que desarrollar y buscar formas de implementar la IA en nuestro día a día. En nuestro sector, la comunicación, la IA es una herramienta que nos puede hacer mucho más eficientes y eficaces. Por ejemplo, este artículo podría haberlo escrito con la ayuda de una IA (eso es exactamente lo que he hecho). Pero también podría completar informes a raíz de unos datos en bruto o redactar correos respondiendo a un comando de voz.
Las posibilidades que ofrece la IA parecen prácticamente ilimitadas, hay que entender bien esta tecnología y buscar oportunidades porque eso va a suponer un valor único y una revolución para el futuro.