Como ya mencionamos en un post anterior, la newsletter es una buena herramienta de la comunicación interna, pero también lo es la revista interna o corporativa.
Acercar la información de la empresa, los logros y los éxitos de la compañía y cualquier otro aspecto que aporte valor a los empleados a través de una revista interna puede ser un gran apoyo a la estrategia de comunicación.
Gracias a este tipo de formato es más fácil llegar a los profesionales de la organización y crear un sentimiento de pertenencia. Normalmente, en una publicación de este tipo se pueden encontrar noticias positivas sobre el crecimiento o beneficios de la compañía, RSC o compromiso de los empleados en el ámbito social. Sin embargo, aunque la teoría parezca fácil, llevarla a la práctica es otra cuestión.
Claves que toda revista interna debe de tener en cuenta:
- Mensajes alineados. Una revista interna no consiste en plasmar alguna acción e historia de la compañía sin más. Lo que se comunique debe estar alineado y coordinado con la estrategia y plan del negocio, las necesidades actuales de la compañía y, por supuesto, la estrategia de comunicación.
- Coherencia en todo momento. La revista interna es un fiel reflejo de los valores de la empresa. Por ello, todo lo que se cuente y se comunique tiene que ser acorde a la imagen de marca. Por ejemplo, si desde sus inicios la compañía ha comunicado de una forma menos informal o más desenfadada, el tono de la revista debe de mantener ese mismo estilo. La idea es no confundir a los lectores, en este caso empleados, y hacerles ver que lo que están leyendo es un contenido de “la casa”.
- Formato e identidad. ¿Cómo llamarla? ¿Qué estilo usar? ¿Tiene que tener algún guiño al sector de la empresa? Antes de empezar con el contenido, hay que elegir un nombre y una identidad visual atractivos, siempre acorde a la imagen de la empresa y que invite a los empleados a leerla. El formato también es clave. Hay que definir su extensión, secciones, orientación (vertical u horizontal) y formato de distribución (digital o impresa). En este último punto, recomendamos que la revista sea digital. Además de ahorro de costes, se apuesta por la sostenibilidad.
- Contenido. ¿Artículos, entrevistas o ambos? Para preparar la información es importante nutrirse de contenido, para ello, las entrevistas a empleados o directivos pueden ser buenas fórmulas. También las informaciones sobre futuros y pasados eventos de la compañía.
- Periodicidad y difusión. En función del peso de la compañía y la capacidad para generar noticias e información, la frecuencia de su difusión variará. Puede ser mensual, bimensual o, incluso, una revista anual. Sobre los canales de distribución, hay que elegir cuál es el más idóneo para la compañía: a través de un emailing, una landing page específica para esa revista, en el portal interno de la compañía, etc.