Hoy, y todos los 13 de febrero desde hace nueve años, se celebra el Día Mundial de la Radio. La onomástica fue elegida por la ONU en 2011 como homenaje a su propia radio, creada el 13 de febrero de 1946.

Como muchos de los avances tecnológicos del Siglo XX (algo que sigue ocurriendo en el XXI) la radio nació en tiempos de guerra. Tras ser utilizada durante la Primera Guerra Mundial, en los años 20 nació como primer gran medio de comunicación de masas, tanto informativo, como de entretenimiento.

La historia de la radio es larga y llena de matices, anécdotas, personajes históricos y ciencia, pero cien años después de su comercialización sigue siendo uno de los pilares comunicativos de la sociedad. No solo eso, sino que el audio, en otros formatos y soportes que van de la mano de la radio, como por ejemplo el podcast, son en la actualidad. pilares comunicativos.

La llegada de internet supuso una revolución en el panorama audiovisual comunicativo. Sin embargo, la radio fue la que antes y mejor supo ver Internet como un aliado y no un rival. En la naturaleza de inmediatez de la radio está también el instinto de supervivencia. No sucumbió al estallido de la televisión y tampoco lo hizo con la llegada de la banda ancha.

Desde Orson Wells, la llegada del hombre a la luna, todos los eventos deportivos imaginables, seguimiento en directo de acontecimientos de toda índole hasta las ahora tan populares tertulias, la radio ha formado parte del mundo de la comunicación desde hace cien años.

Sin embargo, en esa transformación constante en la que vive, es cierto que se ha ido puliendo cada vez más hacia un medio de comunicación informativo e incluso sus espacios destinados al entretenimiento tiene un gran componente formativo. Hoy por hoy es inconcebible pensar en la vuelta de las radionovelas y cada vez son más las estaciones de temática específica, lo que cada nicho de audiencia agradece.

En este día Mundial de la Radio se demuestra que la tecnología no para de evolucionar, pero que una buena adaptación a los cambios es crucial para los medios de comunicación. En la actualidad es el, durante años, hermano poderoso de la radio, la televisión, la que ve peligrar su existencia con las plataformas de contenidos y de streaming, mientras la radio «sin hacer ruido» ha encontrado su espacio; en nuestro coche, en nuestra cocina, en nuestro móvil,, en nuestro ordenador en incluso en nuestro televisor, para seguir emitiendo y mantenerse como una referencia informativa y comunicativa en el Siglo XXI.